Junio = Exámenes...

Si, yo también estoy de exámenes... la humanidad desea que llegue verano pero los estudiantes vivimos muy bien en esa época primaveral abril-mayo que nos permite disfrutar del "casi" buen tiempo, tirándonos en el césped aprovechando hasta el último día de mayo antes de meternos entre cuatro paredes a engullir apuntes.

¿Sabéis lo que es ponerse ahora a estudiar? este calor, las piscinas abriendo, los niños gritando desde la calle, las terracitas... es más, ya hay gente que coge vacaciones para irse a la playita.... grrrrr pero lo que más me repatea (y lo siento si alguno estáis en esa situación, solo me refiero a los que van a mi misma biblioteca jeje) lo que más me repatea son los que tienen ahora selectividad... bufff que van a la biblioteca a dar por saco, todos ahí comiéndonos los apuntes y ellos que si el mp3, que si me como un chicle, que si salgo al baño, que si hago un descanso, que si me suena el móvil, que si envió un mensajito.... y claro, aquí la moi como tenga el día chungo... se desconcentra... y que pasa cuando no puede estudiar... pues que se le pone una mala leche... pobre Pablo que es el que le toca aguantarme.. es un santo! jejeje

Pero bueno no todo son cosas malas, cada vez que haces un exámen es un peso menos, una liberación pero al poco tiempo esa satisfacción fuera que toca estudiar el siguiente. Y me diréis... porque no empiezas a empollar antes? así no te tienes que estresar tanto... pues es que yo sin estres no retengo información jeje tengo que tener "algo" que me obligue... eso que tan bien hace el calendario. También me ha pasado, que si empiezo antes... pues llega un momento que me aburre, asi que tengo que estudiar con el tiempo justo, que es como mejor se estudia.

y como mi querida amiga Elena me dice que me diga a mi misma:
"YO PUEDO" (funciona) ;)

Parece que fue ayer...

...pero dos años han pasado ya, dos años desde que me cansé de aquel novio con el que empecé con apenas dieciocho años y con el cual duré hasta mi viaje de mitad de carrera a Cancún. Dónde una simple pregunta de Elena me hizo recapacitar y tomar una decisión que solo retrasaba las cosas: ¿pero, eres feliz?... ya os imaginareis mi respuesta... No.

... dos años han pasado desde que entre en aquel chat solo para conocer gente y en el que encontré dos caminos distintos, camine por los dos a la vez, pero pasados un par de meses tuve que elegir y... elegí mal. Uno de ellos era Lucas, 26 años "mi tipo" de chico, ese que siempre dibujamos en nuestra mente esperando encontrar algún día. Pero Lucas a pesar de la libertad y sensaciones que me aportaba, interiormente no me llegaba a llenar ni la quinta parte de lo que necesitaba. El otro camino fue el camino equivocado, el causante de que este blog empezara así: EL MAL CAMINO.

Pero a pesar de todo esto y de todas las cosas malas que me han pasado pasado, puedo sacar cosas muy buenas:
- Que conocí a Pablo (te debo una entrada :p).
- Que pase lo que pase y haga lo que haga mis amigas siempre estarán ahí.
- Que me independice y aunque me costo, creo que lo llevo bastante bien... ya para siete meses... y lo más importante es que puedo compaginar mi independencia con mi vida familiar también recuperada y más unida a mi padre, tras lo que paso.
- Que descubrí que mi sexualidad no era como yo pensaba.
- Que hacer lo que uno quiera está bien, siempre que se haga con respeto hacia los que te rodean y hacia tu propia persona sobre todo.
- ...

Un año ha pasado desde que abandone Madrid... y salgo de la misma universidad descubriendo un mismo paisaje primaveral y sintiendo la misma rabia que hace un año porque no puedo disfrutar del mismo y tengo que meterme en la misma biblioteca a estudiar las mismas asignaturas tras las cuales se cierra este círculo, que hace un año empecé sin vuelta atrás y que tanto me ha costado cerrar.

¡¡¡ Feliz Primavera, ahora si que continua mi vida donde la deje !!!

Pablo más Cerca que nunca...

Pasados apenas veinte días fui a ver a Pablo, este año no podía perderme las Fallas y decidí ir a pasarlas con él.
Al día siguiente de mi llegada nos pusimos el pañuelo fallero y no pudimos evitar pasarnos el día viendo fallas, comiendo buñuelos, viendo la ofrenda floral, las falleras... y todo lo típico. Llegamos muy cansados a casa de Pablo y encima nos encontramos con un gran problema: el 25 de abril nos echaban a Elena y a mi de nuestro piso. Habíamos tenido un mal entendido con el dueño y nuestros recursos económicos no era para "tirar cohetes".

Me vi fuera de Madrid, sin casa y sin un duro... menos mal que Pablo estaba allí. Siempre me quedará esa duda que había surgido un par de meses antes, pero también pienso.. y noto que ahora eso es lo que menos importa, que da igual. Que después de todo lo que ha hecho por mi... esa duda es insignificante. Además que confio en él, Paola existe y el tiempo me lo dirá.

En un par de días y viendo que el dueño de mi piso no ayudaba a llegar a un acuerdo, llegue a pensar dos posibles soluciones a mi problema: o volver a casa de mis padres o irme debajo de un puente. Reflexione sobre la primera, porque la segunda era impensable jeje, sabía que necesitaba ayuda pero no de ese tipo. Elena si que volvería a casa de sus padres.

Por fin Pablo dijo lo que pensaba, él en mayo vendría a vivir a Madrid pero por su cuenta, así que me propuso adelantar su mudanza y venir conmigo a vivir.

Adelantamos la vuelta a Madrid y con los días pisándonos los talones buscamos un piso nuevo que se adaptara a nuestras posibilidades y necesidades. Íbamos por el centro de Madrid con periódico en mano, móvil, papel y boli llamando a cualquier anuncio que pudiera merecer la pena. Vimos un piso tras otro, pero no encontrábamos ningún sitio en el que, por lo menos, se pudiera medianamente vivir.

El día de antes a mi mudanza fuimos a ver uno de los últimos pisos... y por fin nos gusto uno, bueno... gustarnos para quedarnos toda la vida no, pero para no quedarnos en la calle sí.

... Cambiamos las vistas de mi anterior piso, pero a cambio, creo que tenía algo mejor justo en frente de casa...

El Retiro...

Nuevas Vistas...

Estoy de exámenes, concentrada, ese pensamiento obtuso que tenía de Pablo se fue. Ya no somos pareja, no viviremos juntos, no vendrá de Valencia a Madrid, no sé si somos ni siquiera amigos. D repente hago como si no existiera, voy a mi rollo, a mis cosas.

Creo que así dure dos días, no puedo evitar hablar con él y día a día voy hablando más y más. Las conversaciones se alargan, las llamadas de teléfono se multiplican y pronto volverá a venir a verme a Madrid.

No puedo evitar ser como mínimo su amiga, en estos días me he dado cuenta de que lo que sentía no era real, de que empecé una relación fantasma que no sentía simplemente porque estaba sola y necesitaba cariño. Pero también me he dado cuenta de que Pablo me atrae, de que le tengo muchísimo cariño, de que le necesito, que me gusta estar con él... y una lista interminable de puntos en el que no cabe el punto llamado AMOR.

Elena me propuso irme a vivir con ella a Madrid capital, ella terminaba su carrera e iba a empezar sus prácticas en un hospital de Madrid. Yo por otro lado ya le había dicho al dueño de mi piso que lo dejaba, además estaba cansada de Alcalá. Necesitaba cambiar de aires.

Cambié de piso después de exámenes, me gustaba la zona de mi nueva casa, pero duro poco. Estaba más lejos de lo que yo pensaba, un poco aislado de transportes, zonas comerciales y lejos de Esther que era la amiga con la que salía a distraerme los sábados por la noche.
Por otro lado, vivía con mi amiga Elena y gozaba de muy grata compañía y cariño, pero demasiado estaba demasiado solitaria los fin de semana.

...UN GRAN REGALO ERAN LAS VISTAS QUE TENÍA...

Exámenes y Decepción...

Por fin veía como mi vida iba volviendo poco a poco a su lugar, pero ahora en pleno enero y con mis exámenes a la vuelta de la esquina, eran ellos los que ahora me preocupaban. Empecé a ir a la biblioteca con Elena, en pocos días sentía como si no hubiera pasado el tiempo, como si nada hubiera pasado. Volvíamos a contarnos confidencias, a reír, a comer juntas... y por supuesto a estudiar.

Pablo rondaba siempre entre nuestras conversaciones, mi pensamiento futuro para el mes de marzo era irme a vivir con él. Pablo quería cambiar de aires, estar conmigo y compartir su vida ya no solo como pareja sino como persona.

Pero una idea rondaba mi cabeza desde hacia tiempo...

Cuanto más hablaba y conocía a Pablo, menos relación tenía con Paola (amiga gracias a la cual conocí a Pablo) Paola poco a poco desaparecía de mi vida y prácticamente no tenía noticias de ella. A Pablo ya le conocía personalmente, pero a ella solo la conocía a través del Msn, ni la había visto, ni la había escuchado, solo había hablado con ella a través de letras, pero sabía que ella estaba ahí, sabía que existía.

Pasado tanto tiempo sin saber de ella comencé a unir cabos que mi cabeza rescataba de mis recuerdos y con un poco de destreza pude ver signos que me indicaban una y otra vez que Paola y Pablo eran la misma persona, no quería pensarlo, no quería que eso fuera así, pero cada día que pasaba estaba más segura.

Un día ya no podía más, no podía concentrarme en mis estudios si no hablaba con Pablo y se lo comentaba, y decidí decirle lo que pensaba. Estaba tan convencida que los signos que había visto que no daban lugar ni a la mínima duda. Pablo y Paola eran la misma persona.
Nuestra relación se acabo, la idea de vivir juntos se escapo por la ventana... todo lo que habíamos sembrado durante estos dos meses se había echado a perder. Me sentía decepcionada, engañada, y sentía, que esas personas que habían sido las únicas que habían estado ahí cuando yo más sola estaba, habían desaparecido de repente.

... A pesar de lo que mi CABEZA pensara, mi CORAZÓN sabía que solo Pablo había estado en los momentos más duros de mi vida en los que solo estaba él para levantarme una y otra vez...